La experiencia en las instituciones educativas, muestra cómo el ser y el quehacer del docente tienen influencia en diversos niveles sociales, porque determinan y marcan a los estudiantes en ámbitos no sólo académicos, como, además, en lo personal. Esta capacidad de influir en los otros, puede observarse como un poder que el docente ejerce, auténtico social e institucionalmente, prefigura y establece no sólo la relación entre docente-estudiante sino la identidad de ambos.
El poder que el docente ejerce en el aula, mediante el que se relaciona con sus educandos, adquiere importancia cuando la forma cómo se ejerce y se manifiesta con los estudiantes constituye un obstáculo y una dificultad en el proceso de enseñanza-aprendizaje, por crear situaciones educativas que propician y facilitan poco el aprendizaje el cual es formalmente el objetivo central de las instituciones escolares y de la función del docente.
El poder que el docente ejerce en el aula, mediante el que se relaciona con sus educandos, adquiere importancia cuando la forma cómo se ejerce y se manifiesta con los estudiantes constituye un obstáculo y una dificultad en el proceso de enseñanza-aprendizaje, por crear situaciones educativas que propician y facilitan poco el aprendizaje el cual es formalmente el objetivo central de las instituciones escolares y de la función del docente.
El poder del educador adquiere relevancia, asimismo, cuando se analiza la manera en que a través de sus estudiantes trasciende el aula y el ámbito escolar, formando en ellos, hábitos, conductas y actitudes frente a la sociedad y a los otros. Las relaciones y el ejercicio del poder del docente en el aula no ha sido un tema estudiado como tal; no obstante, numerosos estudios recientes analizan el saber y el conocimiento como elementos a través de los cuales el docente erige su autoridad y fundamenta de su poder. Otros estudios, enfatizan la relación docente-estudiante como determinante de la conducta del educando, así como del nivel y tipo de aprendizaje que se produce.
Por lo tanto, las relaciones sociales efectivos implican relaciones de poder ya que los seres humanos tratan de orientar, conducir e influir la conducta de los otros. Adoptan diferentes formas y se producen en diferentes niveles. Las relaciones de dominación son aquéllas permanentemente disimétricas en las que la libertad de los participantes se ve muy limitada o prácticamente anulada. Implican obediencia y disciplina. El ejercicio del poder son todos los mecanismos, técnicas y modos que se usan para obtener el poder en una relación: es el modus operandi del poder.
Las situaciones educativas son el conjunto de elementos y factores, que conforman el estado en el que se da el proceso de aprendizaje en un centro educativo o escolar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario